Siete puntos. Cinco puntos. Siete puntos. Cinco puntos. Y un punto más en cada uno de los casos en favor del FC Barcelona por el golaverage particular (el 5-0 de la ida será irremontable). La diferencia entre el equipo culé y el Real Madrid recuerda a una goma elástica, que se estira y se contrae una y otra vez. Sin fin. Quedan diez jornadas, treinta puntos. El último fin de semana es el del 21 y 22 de mayo, cuando el club blanco se enfrentará en el Santiago Bernabéu al Almería y el Barça visitará al Málaga. Dos equipos que, sin duda, estarán peleando hasta ese día su permanencia en Primera División. Aún así, la liga se decidirá definitivamente en el mes de abril.
Primero, porque en el primer fin de semana del mes, los hombres de Pep Guardiola tendrán su visita más complicada de lo que resta de temporada excluyendo la del Santiago Bernabéu: el Madrigal del Villarreal. Ya en la primera vuelta los de Garrido le crearon muchos problemas a los culés y, sin duda, puede resultar un punto de inflexión en esta liga. El Madrid, por su parte, visitará siete días después San Mamés, un campo complicadísimo en el que los de Mourinho también podrían dejarse los puntos. Hablamos de las jornadas 30 y 31.
Pero las jornadas decisivas serán la 32 y la 32 y medio. Me explico. El fin de semana del 16 y 17 de abril el Barcelona visitará el Santiago Bernabéu, donde el Real Madrid podría dar otro zarpazo al equipo blaugrana. Unos días después, el 20 de abril presumiblemente, en Valencia se disputará la final de Copa del Rey entre los dos equipos. Media jornada más. Cinco días. Dos encuentros. Una liga y una copa en juego. Si el Real Madrid vence en liga y se alza con la copa, todo será posible en el campeonato doméstico a partir de entonces ya que representaría un golpe moral durísimo y al que no se han visto expuestos los hombres de Guardiola en estos años. Si en cambio fuera el Barcelona el vencedor en copa y no cayese derrotado en liga, el torneo quedaría visto para sentencia.
Aún así, el calendario para los blancos es mucho más exigente hasta el final ya que deberá acudir a campos como el ya citado San Mamés así como a Mestalla, Sánchez Pizjuán y también el Madrigal. El Barça sólo tendrá, a priori, las dos visitas ya mencionadas anteriormente en las que podría dejarse algún punto. No hay que olvidar tampoco que todo esto estará aderezado por las próximas rondas de la Champions League. El Barça ya está en cuartos. El Madrid aún debe llegar. Pero, si los dos alcanzan esa ronda, se verían profundamente inmersos en un encuentro de 180 minutos que podría ser durísimo. No es lo mismo que a uno le toque el Schalke 04 y al otro el Chelsea, por ejemplo...
Hay liga. Queda todavía mucho hasta el final y pueden pasar aún muchas cosas: lesiones, “accidentes” en campos inesperados, expulsiones en partidos decisivos. No hay que olvidar que esto es fútbol. Aún así, la lógica nos dice que todo acabará, o casi, en el mes de abril.
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